ONEKA SALAZAR / PILOTO DE AVIÓN BOEING 737 NG
¿Crees que los atributos del piloto están idealizados?
Oneka Salazar a bordo de un B737
Creo que se nos añaden grandes etiquetas que en muchos casos no lo son tanto. Cada vez que alguien nos pregunta a qué nos dedicamos, y nuestra respuesta orgullosa e inmediata es “soy piloto de avión”, la mayoría de personas reaccionan con una mezcla de sorpresa y curiosidad que cuanto menos resulta llamativa: en ese mismo momento se dan por probadas cualidades como ser inteligentes, responsables, estudiosos….
Es cierto que todo el mundo tiene una idea más o menos cierta de cuáles son las cualidades de un piloto, pero debemos tener en cuenta que éstas han ido variando a lo largo de la historia de la misma manera que han variado nuestras atribuciones en el desempeño de nuestro trabajo.
¿Cuál es el rasgo fundamental para ser un buen piloto?
Los manuales coinciden en que un buen profesional, sin un buen nivel humano no consigue el respeto de su entorno. No debemos olvidar que un piloto interactúa con muchos equipos a lo largo de su jornada laboral y debe tener gran capacidad de adaptación para conseguir lo mejor de cada uno de ellos.
¿Y la definición del ‘piloto ideal’?
La definición del piloto ideal viene dada por factores psicológicos, rasgos de personalidad, rasgos de conducta, carácter y actitudes personales que en su conjunto forman la esencia de cada piloto. Es muy curioso cuando preguntas a diferentes pilotos sobre cuáles deberían ser las características principales de este tipo de profesionales, porque son tan diversas las respuestas como el numero de encuestados.
Pero sí es cierto que hay unas cualidades que deben ser fundamentales…
Evidentemente. La paciencia, la disciplina, la responsabilidad, la capacidad de tomar decisiones, la capacidad de liderazgo, de adaptación, las buenas maneras, la automotivación o la resistencia a la presión, entre otras, las considero fundamentales.
El piloto debe saber que la paciencia es una virtud básica durante toda su carrera profesional, sobre todo en los tiempos actuales en los que la incertidumbre es grande. Esto requiere un alto nivel de esfuerzo, de tesón y ganas de seguir adelante cueste lo que cueste. De la misma manera, nuestra profesión es de carácter técnico, con una alta demanda de actualización donde el piloto se ve examinado cada cierto tiempo de procedimientos, maniobras y resolución de emergencias, inglés, etc. Por este motivo es fundamental la disciplina, por lo que requerimos altas dosis de constancia para mantenernos actualizados. En cuanto a la responsabilidad, en las manos del piloto se pone la vida de otros y la suya propia, sin dejar de mencionar la nada despreciable suma de dinero en equipos y avión.
¿Esta responsabilidad se traduce en la toma de decisiones?
Sí, es muy importante que el piloto cuente con un buen entrenamiento técnico y humano que le ayude a tomar la decisión más acertada en todo momento, que sea analítico, objetivo y humilde para poder escuchar las ideas de los demás miembros del equipo para minimizar los errores a su mínima expresión y mantener los niveles de seguridad tan altos como sea posible.
¿Es fundamental contar también con una gran resistencia a la presión?
Sí. Ésta es una profesión de resistencia, y más en los tiempos que corren donde no es fácil hacerse un hueco en alguna compañía aérea. El piloto, a lo largo de su vida profesional se va a encontrar muchas situaciones estresantes, en las que va tener que mantener la calma, encontrar la manera de no mermar la capacidad o la autoridad de la persona con quien trabaja, y va a encontrarse en situaciones en las que va a tener que hacerse oír, sobre todo si cree que hay algo que no funciona bien, o que la maniobra realizada es incorrecta por lo que no le va a quedar más remedio que usar todas las armas de las que disponga para conseguir dicho fin.
¿Qué papel juega tener una actitud de automotivación en todo ello?
Encontramos en muchos momentos personas dispuestas a criticar todo aquello que hacemos mal, a descalificarnos y a ser poco constructivos en sus comentarios. Por este motivo es importante valorar actitudes positivas, de tesón, la constancia y disciplina para seguir avanzando, tener la capacidad de aprender de todos los que nos rodean, de tener un objetivo claro y construir día a día el camino para conseguirlo.
