En CESDA, la seguridad aérea no solo se entrena en cabina. También se cuida desde dentro. Por eso, desde finales de 2021, contamos con el Programa PEER CESDA, una iniciativa pionera orientada al bienestar psicológico de estudiantes e instructores de vuelo, con un claro objetivo: reforzar la seguridad operacional a través del cuidado de la salud mental.
Este programa nace inspirado en los sistemas de apoyo psicológico que ya existen en las compañías aéreas, desarrollados especialmente tras el accidente de Germanwings en 2015, que puso de manifiesto la importancia de atender la salud mental en el entorno aeronáutico.
El PIR (Peer Intervention Representative) es una figura de apoyo entre iguales. En las aerolíneas, se trata de un compañero cuidadosamente seleccionado y formado para acompañar y apoyar a otros pilotos en situaciones personales o profesionales complejas.
En CESDA, esta figura la representa un instructor de vuelo, respaldado por un equipo de psicólogos profesionales del centro. Recientemente, además, se ha incorporado al equipo otra persona con experiencia como piloto comercial, reforzando aún más el programa.
El PIR es una persona con:
El programa se sustenta sobre tres pilares fundamentales:
Es un programa totalmente independiente de cualquier organismo médico o aeronáutico. Esto es clave para eliminar el miedo a pedir ayuda y favorecer que tanto estudiantes como instructores den el paso cuando lo necesitan.
Cualquier situación que afecte al bienestar emocional puede convertirse en un riesgo potencial para la seguridad del vuelo. Por eso, el PIR actúa de forma preventiva, ayudando a detectar y gestionar situaciones antes de que se agraven.
La identidad de las personas que solicitan ayuda está completamente protegida.
Los datos solo se utilizan con fines estadísticos y siempre de forma anónima, con el mismo nivel de protección que los registros médicos.
El programa está disponible para:
Instructores de vuelo
Estudiantes
Y pueden solicitar apoyo ante situaciones como:
Estrés, ansiedad o preocupaciones graves
Presión laboral o académica
Conflictos con compañeros
Problemas económicos o familiares
Vivencia de incidentes críticos
Problemas psicológicos, psiquiátricos o conductas adictivas que interfieran en su rendimiento
Cualquier piloto, independientemente de su experiencia, puede atravesar momentos difíciles. Pedir ayuda no es una debilidad, es un acto de responsabilidad profesional.
El objetivo final del Programa PEER CESDA no es apartar a nadie de la actividad, sino ayudar a que instructores y estudiantes puedan mantenerse en activo de forma segura, y que, si necesitan parar, puedan volver cuanto antes en las mejores condiciones.
Formar a los futuros profesionales de la aviación con esta filosofía de prevención, cuidado y responsabilidad es, sin duda, una apuesta por la seguridad de la aviación del mañana.