Miguel Pons fue alumno de la 3ª promoción CESDA y se graduó en junio de 2007.
El día 8 de Octubre de 2015 hizo 8 años de mi primer vuelo comercial con un Saab340 de Wroclaw (Polonia) a Leipzig (Alemania).
Mi carrera empezó en una pequeña empresa polaca con el Saab 340, volando a todo Europa tanto carga como pasaje, una operación muy poco común. Luego me mudé a Austria donde seguí volando el Saab para una compañía llamada Robin Hood Aviation, esta vez volando rutas regulares entre Austria, Alemania y Suiza.
De ahí me trasladé a Alemania donde empecé a volar el Boeing 737 para Air Berlin, estuve en Münster, en Dresden y en Berlin, después de trabajar más de cuatro años en esta empresa decidí cambiar a Ryanair, donde trabajo actualmente, con base en mi hogar, un verdadero sueño hecho realidad.
Durante mi carrera profesional he acumulado un total de 4000 horas aproximadamente.
Recuerdo mis días en CESDA con gran añoranza. Fueron cuatro años muy buenos, cargados de ilusiones, de proyectos y experiencias, pero sobretodo tengo un gran recuerdo de las personas que me acompañaron, tanto en el lado profesional como en el personal.
Multitud de veces durante mi carrera me viene a la memoria la lección de uno, el consejo de otro, como consejeros que me llevan por el buen camino cuando un TRE algo puñetero te pone entre la espada y la pared con alguna pregunta que no está en el guión.
Pues a pesar de que la modestia siempre se considere una virtud, no tengo ningún reparo a decir en las entrevistas de trabajo que soy un piloto universitario.
"Hasta ahora, solo me ha abierto puertas, casi me atrevería a decir que ha sido una especie de llave maestra!"
Ahora que estoy metido en el mundo de la aviación, no le veo sentido a ser piloto sin un título universitario teniendo dicha posibilidad, es sin duda, una gran tranquilidad en todos los aspectos.
Esta claro que lo sueños, aunque no debieran, evolucionan, y normalmente tienden a aumentar su complejidad, como la vida misma.
Antes me bastaba con mantenerme en el aire, ahora busco en mi profesión algo más, busco que me llene, que me aporte retos, que me de la posibilidad de mejorar y por supuesto que se adapte a mi vida personal, cada vez más compleja. Pero por supuesto, no deja de ser un sueño hecho realidad.
Hay que aplicar la dosis correcta de varios ingredientes: flexibilidad, terquedad, empatía, extroversión, compañerismo, liderazgo, y que la mezcla no se corte.
"Pero ante todo, ser uno mismo, a la que finges, te pillaron."
La preparación es fundamental, una entrevista, nunca suele ser solo una entrevista. Hay unas pruebas psicotécnicas, unos exámenes teóricos, de inglés, prueba de simulador, ejercicios de grupo… Normalmente, preguntando a uno y a otro, o buscando por internet puedes obtener mucha información, a veces incluso es la propia compañía la que te aporta la información!
Pero en cualquier caso, siempre hay que buscar la manera de prepararse, además, “¿Cómo te has preparado para estas pruebas?”, suele ser una pregunta que nunca falta en la fase final.
No hay entrenamiento fácil o difícil, solo hay entrenamientos que te tienes que preparar un montón. Tanto en la escuela como en las compañías, todas las habilitaciones, pruebas anuales de simulador, etc… suelen ir sujetas a un sílabus, la única fórmula es preparárselo, minimizar el espacio a la improvisación.
Adaptabilidad. Cuando vas por el mundo, no te aceptan solo porque en España hace sol, es necesario adaptarse a la manera de hacer las cosas, al país, a la gente, la cultura, el idioma, la manera de interrelacionarse.
Excepto para la compañía que trabajo ahora, el resto no han sido pluriculturales, por eso, siempre han esperado de mí que me comportara y actuara como uno más, algo que no es ni mucho menos una tarea fácil!
Miguel Pons