Cástor Fantoba, Bravo 3 Aerobatic Team. Ingeniero Técnico Aeronáutico y Comandante de Boeing 737, 757 y 767. Es también Piloto Agroforestal, con experiencia en extinción de incendios.
1. Compite al máximo nivel en cuanto al vuelo acrobático. ¿Las sensaciones que siente en cada vuelo es como si pilotase uno de estos aviones por primera vez?
Bueno, afortunadamente no. En los primeros vuelos la intensidad de las mismas es terrible. Según te vas especializando y adquieres más experiencia, tu atención deja de estar tan focalizada, amplías tu campo de atención y te relajas. Eso sí, físicamente, las sensaciones van a más, según las maniobras van siendo más duras. Pero vas creciendo como piloto con ello.
Siempre
3. ¿Y en cambio, el exceso de confianza puede ser el primer enemigo?
Uno de los primeros desde luego. Pero no es el único. Por muy metódicos que seamos, siempre hay factores que pueden salirse de lo previsible: meteo, mecánica, salud…y hay que intentar siempre tener un plan B.
4. Suponemos que en estas exhibiciones en las que participa no hay lugar para la improvisación...
No, de hecho, se evita. Volamos un programa determinado, que hemos entrenado a conciencia. Para ello, un briefing nos deja claro lo que vamos a hacer, y después, un debriefing lo que debemos corregir. Y por supuesto, procedimientos, procedimientos y procedimientos: siempre repetir la misma rutina.
5. ¿Qué sintió la primera vez que participó en un vuelo acrobático? ¿Cómo fue la experiencia y qué le motivó a seguir?
Que eso es lo que quería hacer el resto de mi vida. La experiencia fue fantástica, intensísima y marcó mi vida. Después de ello, racionalmente o no, decidí dedicarme a ello.
6. ¿Es rentable el vuelo acrobático o todavía no permite vivir de él?
No, desgraciadamente el vuelo acrobático te obliga a invertir mucho dinero y tiempo, y cuanto más mejor, pero no te permite vivir de ello. Hoy por hoy, a lo mejor que podemos aspirar como pilotos acrobáticos es a cubrir los gastos generados por el deporte. En mi caso particular, y gracias a la ayuda de nuestros patrocinadores, el equipo Bravo3 Repsol, integrado por Juan Velarde, Anselmo Gámez y yo mismo, podemos mantener un extenso calendario de entrenamientos, exhibiciones y competiciones, que de otra manera no podríamos financiar. Y por supuesto, debemos seguir trabajando como pilotos de línea para llegar a fin de mes.
Que se apliquen y aprovechen lo más posible esta primera etapa, que les dará la base para convertirse en los profesionales del futuro. Estamos en una época muy difícil para la profesión y muchos de nosotros nos hemos tenido ir de España para poder trabajar, pero vendrán buenos vientos, y las empresas buscarán a los mejores para formar parte de sus tripulaciones. Es momento de prepararse para eso. También, desde ahora, hacer todas las horas de vuelo que puedan, sea en escuela, trabajos aéreos, ferry…un día esas horas, esa experiencia, serán las que les abra el paso a su siguiente trabajo.
8. Cuéntenos alguna experiencia curiosa o interesante que haya vivido a lo largo de su dilatada experiencia como piloto...
Los increíbles recuerdos que me han dejado mis tres campañas de incendios. Es un trabajo precioso, arriesgado y que requiere de buenas manos. Para los que estáis pensando en elegir un camino u otro, es una posibilidad a valorar. Ahora bien, se requiere una buena experiencia previa en patín de cola y manejo de avión, excusa ideal para iniciarse en la acrobacia. Sirva esto también como pequeño homenaje a los pilotos de extinción, de los que tan poco se habla y a los que tanto debemos.
